El hockey es como la vida misma por Edu Isla

Si hay algún personaje relacionado con el hockey que apetecible de conocer por cómo se enfrenta a la vida, ese es Edu Isla, capitán del F.M. Oviedo. Siguiéndole su perfil de facebook, es muy agradable ver que siempre sale con una sonrisa en las fotos y sus comentarios son de los más positivos.

Este fin de semana vienen de vencer al Sant Cugat claramente y con ello salen de la parte más baja de la clasificación y, además, aprietan la cabeza. 

Nos pusimos en contacto con él para que nos diese su punto de vista del hockey, de la vida, y nos ha mandado este articulazo. Muchas gracias Edu! En la vida, como en el deporte, sonríe!

El deporte es como la vida misma, penas y alegrías, esfuerzo, sufrimiento y sacrificio. 

Aún me acuerdo de cuando empecé “venga, anímate, pruébalo…tu hermano ya empezó y te pasas horas aquí viéndolo ¿por qué no te animas?” Pues oye, decirlo, probarlo y no hubo nada mejor, pasarse una media de 5 horas diarias patinando, caídas muchas y varias y de diferente índole, pingaduras, granizadas, nevadas, esos periódicos para envolver las botas para que se secaran…pero algo tenía que seguías, te levantabas y volvías a caer y/o patinar, al menos intentarlo. 

La esencia de aquellos tiempo se ha perdido, antes si entrenabas con los más mayores te sentías afortunado por compartir aunque fuera unos minutos, aunque tuvieras que recoger todo el material por ser el pequeño, pero lo hacías porque querías aprender, mejorar, avanzar, ser mejor,…todo ello independientemente del tiempo que te llevara este deporte, estabas dispuesto a pasarte en una pista horas y horas, ahora….los tiempos han cambiado. Me acuerdo que entrenaba en la escuela, con los prebenjamines y si me dejaban entrenaba con el equipo de mi hermano (3 años mayor) y cuando podía con los más mayores (ahora veteranos)…eso era disfrute, respetabas a aquellos que te asesoraban, aquellos se enfadaban contigo, aquellos que te corregían, que te enseñaban y te formaban, pero sabías que esos mismos son los que te creaban las ilusiones de este deporte. Y ahora, después de tanto tiempo, cada vez que puedo, subo a jugar con los veteranos que me enseñaron, con mi hermano y gente que jugaba con él gracias a los cuales he visto y aprendido hockey, visitado infinidad de lugares donde se vive el hockey y vuelves a rememorar viejos tiempos, y como no el anterior hockey. 

Cuando empiezas no eres consciente de lo realmente difícil que es este deporte, HOCKEY SOBRE PATINES (creo que este deporte se merece ponerlo en mayúsculas, los méritos están ahí, una pena el poco reconocimiento), es coordinación pura y dura. Me acuerdo cuando empecé a entrenar a los críos y a arbitrar, en los partidos de los más pequeños es en los que más he disfrutado, ves la complejidad de este deporte y también el disfrute de uno mismo, uno a quien le guste enseñar, ya seas árbitro, jugador y/o entrenador, o incluso todo a la vez, pues en esas edades da igual del equipo que seas, si eres juez o no, lo que quieres es ver esos críos ilusionados, que vean que tú disfrutas y además los ayudas para mejorar. 

Es cuando te inicias cuando adquieres ciertos valores y educaciones, deportivas y las no tan deportivas. Se ha perdido mucha esencia de antaño, cuando los patines solamente los compraban los mayores y tú los ibas heredando de aquellos que tenías idolatrados, aquellos que te enseñaban cada día. 

Ahora a los niños, (en una gran mayoría), se les exige ganar, resultados, independientemente de la calidad, de la táctica, del propio aprendizaje de los propios niños…solamente ganar o quien mete los goles. Hay edades para todo, cuando eres pequeño, por encima de todas las cosas (incluso de los resultados, ¡qué locura eh!, aunque se que muchos no estarán de acuerdo) está el mejorar, el aprender, el comprender el porqué de muchos movimientos, actitudes, gestos, minutos…aunque caigas derrotado en innumerables partidos, pero a la larga…de ese trabajo que has realizado, de esas derrotas, de las pocas victorias, habrás cosechado un trabajo base del que más adelante te darás cuenta que no era en vano. No todo es “El Resultado”. El trabajo y las enseñanzas y educaciones que te dan de pequeño son la semilla para un fruto de calidad. 

Muchos años te dan mucho, bueno y malo, pero sobre todo te enseña y te hace ver que el deporte no es solamente ganar, es algo que va más allá, el deporte es disfrutar, es ilusión, pasarlo bien…se puede perfectamente competir y disfrutar, todo es compatible, el día que realmente no disfrutes de las pequeñas cositinas de este deporte será el día que debas buscar una ilusión. 

Cuando entras en una pista no hay más, solamente hockey.

Un fuerte stickazo a todos.